Domingo, 12 de Octubre de 2008


Tras diecinueve días de deliberaciones infructuosas en el Congreso de Shangrilandia, donde se negociaba la solución política del maremoto ocasionado por la quiebra de Lechon Brothers y la posterior huída y pase a la clandestinidad de Mary Lynch; el Juez Cletus Cadorna, titular de la Corte Suprema, se llenó las gónadas y haciendo uso de las atribuciones que le dá la Septuagésimoprimera Enmienda -más conocida como Enmienda 71, que faculta a la Corte Suprema a tomar en sus manos la implementación de medidas de emergencia cuando el país corre peligro de irse a la... por la cloaca-, ordenó, entre otras medidas de emergencia, la inmediata estatización de la Banca y la Reforma Agraria a fin de devolver algo de dignidad a los peones, sean estos campesinos o gerentes del sistema bancario de Maryland.
Consultado por este medio respecto a la demora del sistema político para aprobar un paquete de medidas que evitara llegar a estos extremos, donde se desdibuja la rancia estirpe capitalista de la República de Shangrilandia, el Juez Cadorna, visiblemente alterado, declaró:
Juez Cadorna: - Estoy más caliente que un chorizo; en mis 45 años de carrera como Presidente de la Corte esta es la primera vez que me veo obligado, por la supina ineptitud del Areópago Federal de Shangrilandia y esa caterva de pseudoareopagitas, a tener que echar mano a la Septuagésimoprimera Enmier... Enmienda!. Pero esto no va a quedar así, ah no...no señor, ya cursé precisas directivas al General Cangallo para que le presente mi decisión irrevocable de dirimir en el campo del honor la vergonzosa posición que me obligó a adoptar, al Presidente Jorge Vedoble Losar Bustos.
CG Revista: - Pero, Doctor!. ¿me está diciendo que lo retó a duelo al Presidente?.
JC: - Así es, y espero que el Señor Presidente haga honor a la estatura moral de su familia.
CGR: - Y eso significa...
JC: - Que más le vale que no se escape a su Refugio Secreto en la Montaña...
CGR: - Y... ¿se puede saber qué armas elegirían?
JC: - Le dí a elegir entre la espada, el rebenque o una botella rota de Pilsen.
CGR: - Vaya detalle, las armas del castigo divino!
JC: - Sí, divino. Divino le va a quedar el morro cuando lo agarre a botellazos...
CGR: - Pero, Doctor Cadorna!...
JC: - Su Señoría...
CGR: - Gracias, pero no creo merecer tal tratamiento...
JC: - No, pelafustán!... que me llame Su Señoría, tal cual lo manda la dignidad de mi cargo.
CGR: - Está bien, no es mi intención trabarme en disputa con Usted... Su Señoría!. (pero por qué no te hacés culiar, viejo choto – pensé -).
JC: - ¿En qué estábamos?...
CGR: - En que me parece un tanto extremosa su decisión...
JC: - De ninguna manera. Yo soy el Presidente de la Corte, un ejemplo para la Comunidad...
CGR: - Eso es indudable, pero...
JC: - pero, las pelotas!... el Honor no se negocia... ¡La hipoteca firmada no será negociada!...esa es la Ley Suprema, a la Maryland.
CGR: - Bueno, no se sulfure Su Señoría, que le va a dar un bobazo!.
JC: - Mire jovencito, yo no voy a ser la milanesa del sandwich en este despelote, y tomeselás que tengo cosas que hacer...

Habida cuenta que el Juez Cadorna había dado por terminada la entrevista, este cronista arrancó silbando bajito en busca de una parrilla donde mitigar la angustia oral provocada por la delicada situación político-económica de Shangrilandia. Misión que no pudo ser cumplida dado que en todos los comederos visitados me sacaron carpiendo al grito de... “parrilla!, yo te voy a dar parrilla a vos junagranpaelapuerta!... ¡acá estamos todos al horno!”.


Su Señoría. El Juez Cadorna, capturado por la lente de CG Revista al momento de dictaminar la implementación de la Enmienda 71.

1 comentario:

Anónimo dijo...

EXTRA EXTRA!
DEESTITUYERON AL JUEZ CADORNA
EXTRA EXTRA!